29/9/14

Lo humano del virus del Ébola: sobre cuarentenas y derechos humanos


¿Qué te viene a la mente cuando escuchas la palabra “Ébola”? ¿Virus, bicho, sangre, África, muertos, hemorragia, infección, contagioso, fiebre, epidemia, lejos? Si estas fueron algunas de las palabras en las que pensaste significa que, al igual que muchos de nosotros, la idea básica que tienes del Ébola es que es un virus que infecta y mata a personas en África. Estas aseveraciones son ciertas y es correcto que estén en tu mente. Sin embargo, el Ébola es un fenómeno mucho más complejo. El Ébola no sólo es un virus o una enfermedad, sino un fenómeno social con múltiples implicaciones de las que no podemos dejar de hablar.

Y aquí va un pequeño ejemplo del lado humano del Ébola. No es lo único que ha sucedido a raíz de este brote, pero es una situación que llamó mi atención y por ello quisiera mencionarla.

Como medida de contención, los diferentes gobiernos donde se han dado los brotes de Ébola han impuesto cuarentenas1,2. Las cuarentenas son medidas que restringen la entrada o salida de casas, barrios y pueblos completos donde se han reportado personas infectadas. La restricción se aplica a toda persona que se encuentre en el área, esté infectada o no. Estas áreas de cuarentena tienen la función de no permitir que la infección por Ébola se siga esparciendo. Así que, en teoría, sólo habría que esperar un tiempo y cuidar a las personas en cuarentena hasta que sanen y la enfermedad se acabe. Pero, como bien lo sabemos en México, hay una gran diferencia entre la teoría y la práctica.

Las restricciones en las cuarentenas implican conflictos con los derechos humanos de las personas allí contenidas, ya que se interfiere con su libertad de tránsito y de acceso a servicios básicos. Sin embargo, como lo menciona Human Rights Watch, el derecho internacional autoriza cuarentenas si se dan por emergencias sanitarias, si están bien reguladas por el gobierno y si se asegura que el gobierno cumpla con las obligaciones de brindar comida, agua y asistencia médica2. El problema es que en África, las cuarentenas no están cumpliendo estos requisitos. 

Las personas que están en las zonas de cuarentenas están aisladas, no tienen acceso a cuidados médicos adecuados, a suficiente comida3, agua limpia, o productos de limpieza2. Parece como si sólo se estuviera esperando a que las personas de estas zonas murieran para terminar con el problema del Ébola.


Por situaciones como las de estas zonas de cuarentenas es por las que se pide ayuda internacional. Los países africanos donde se han dado los brotes de Ébola son de los países más pobres del mundo (Guinea, Liberia, Sierra Leona, Senegal y Nigeria), por lo que no se considera que tengan los recursos suficientes para lidiar con la situación.

Suena raro decirlo, pero creo que aquí sí se justifica pedir la intervención de Estados Unidos. Ahora es cuando Obama.

Escribo esto porque hay que tener presente que las personas infectadas no son sólo pacientes o números en un estudio epidemiológico, sino individuos con derechos que forman parte de una comunidad. Así que hay que olvidarse por un momento del aspecto virológico de este blog para hablar un poco del lado humano del virus.


Referencias

1. Life under Ebola quarantine – in pictures. the Guardian at
2. West Africa: Respect Rights in Ebola Response | Human Rights Watch. at

3. Blair, D. Ebola patient escapes quarantine centre in search of food. (2014). at

17/9/14

¿Y si el virus del Ébola empieza a transmitirse por aire?


Mucho es lo que se ha especulado sobre el virus del Ébola. Y, para ser sincera, con justa razón se le debe de temer. La verdad es que si no se le controla pronto, este brote de Ébola podría resultar en la muerte de decenas de miles de personas en África. La ONU lo ha dicho, la OMS lo ha dicho, el CDC lo ha dicho, creo que hasta el Papa ha comentado algo.

Un aspecto en particular sobre el que se ha especulado mucho es la posibilidad de que el virus del Ébola empiece a transmitirse por aire. Se da por hecho que el virus lo puede hacer en cualquier momento y que, de lograrlo, estaríamos perdidos. Es como si el mundo estuviera a la expectativa del momento en que el Ébola mutara para salir volando de África e invadir el mundo. Esta discusión se ha visto condimentada por la editorial publicada recientemente en The New York Times por Michael T. Osterholm, de la Universidad de Minnesota, quien afirma que este cambio es posible y que los virólogos están evitando discutirlo abiertamente para no crear pánico1. ¿Será entonces capaz el Ébola de empezar a transmitirse por aire? Al menos todas las películas así lo indican.

En el mundo real, el Ébola no se transmite por vía aérea sino por contacto directo entre dos personas. La persona infectada lo contiene en sus fluidos corporales (sangre, sudor, semen, orina, heces, saliva). El virus se transmite a una persona no infectada al entrar en contacto con membranas mucosas (ojos, nariz, boca, oídos, área genital) o mediante heridas en la piel2. En otras palabras, se requiere de un contacto muy cercano para poder darse la transmisión, razón por la cual se han dado tantos casos entre enfermeras, médicos y familiares de los pacientes3.

Un virus transmitido por aire, por el contrario, no requiere de este contacto directo. La transmisión por aire puede darse de dos formas: 1) por partículas virales que son capaces de estar suspendidos en el aire y/o 2) por aerosoles, donde las partículas virales se encuentran en pequeñas partículas de saliva producidas durante un estornudo o al hablar. Este tipo de virus puede acceder a múltiples personas que se encuentran a varios metros de distancia de la persona infectada. Los virus de la influenza o de la rubeola son buenos ejemplos de transmisión por aire.


Para que el virus del Ébola pueda empezar a transmitirse por aire requiere cambiar su estructura. ¿Por qué? Porque la estructura del virus actual no le permite hacerlo. Para ser transmisible por vía aérea, el Ébola requeriría4:

  • Contar con estructuras que le permitieran replicarse con gran eficiencia en células del sistema respiratorio (garganta, bronquios y/o pulmones).
  • Ser capaz de adherirse a las células de las vías respiratorias. Es decir, requeriría una nueva estructura que lo hiciera capaz de llegar a la nariz o garganta y quedarse pegado allí.

Aunado a ello, todos estos cambios tendrían que brindarle al virus una ventaja costo-beneficio. Desde un punto de vista evolutivo, este tipo de cambios estructurales implican mucha inversión por parte del virus, por lo que la transmisión por aire tendría que ser mucho más eficiente que la transmisión por contacto directo. Por ello es por lo que los expertos consideran que aún no ha surgido un virus “aéreo” del Ébola que sea dominante. Simplemente porque el Ébola no necesita cambiar. ¿Para qué si su forma de transmisión ya es bastante eficiente?

Es importante remarcar que nunca se ha registrado el caso de un virus que cambie por completo su ruta principal de transmisión de forma natural5. Es decir, no se ha documentado a un virus que haya cambiado completamente del contacto directo a la transmisión aérea, o viceversa. ¿Y los casos de los que se habla en los periódicos? Son casos aislados que no son representativos de toda la población de virus. Si uno de cada mil casos de transmisión se da por aire y los 999 restantes se dan por contacto directo, no se considera que el virus haya cambiado su mecanismo de transmisión. En el laboratorio se pueden estudiar este tipo de cambios mediante los llamados gain-of-function experiments, siendo el caso del trabajo con el virus de influenza H5N1 el más famoso y escandaloso6.

En conclusión, no es que el Ébola no pueda cambiar para empezar a transmitirse por aire, pero es muy poco probable. Tendrían que ser muchos los cambios que tendría que sufrir para poder lograrlo y estos cambios tendrían que brindarle un beneficio real. Claro que eso no significa que no debamos estar preocupados por este bicho. Recordemos que un virus no requiere ser capaz de transmitirse por aire para causar daños considerables en los seres humanos. ¿Qué tal lo ha hecho el VIH? Por lo que girar la conversación sobre el Ébola hacia este tema sería una enorme distracción del problema real, el cual es llevar ayuda a aquellos que la necesitan5. Mejor dejémonos de especulaciones y centrémonos en lo importante.

Vanesa, PhD


P.D. Este es un buen ejemplo del por qué la población en general debe saber sobre ciencia. Allí está el caso de Todd Rokita, congresista del estado de Indiana que difundió la idea de que niños migrantes eran un peligro para EUA porque llevarían Ébola a territorio americano7. Él utilizó el temor y la desinformación sobre el virus del Ébola para manipular a la población. Si el público en general estuviera bien informado, este tipo de afirmaciones no tendrían eco.



Referencias


  1. Osterholm, M. T. What We’re Afraid to Say About Ebola. The New York Times (2014). http://www.nytimes.com/2014/09/12/opinion/what-were-afraid-to-say-about-ebola.html  
  2. Centers for Disease Control and Prevention. Transmission.http://www.cdc.gov/vhf/ebola/transmission/  
  3. Almendrala, A. The Most Destructive Myths About Ebola Virus, Debunked. Huffington Post (2014). http://www.huffingtonpost.com/2014/08/06/ebola-myths_n_5655662.html
  4. Fact or Fiction?: The Ebola Virus Will Go Airborne. http://www.scientificamerican.com/article/fact-or-fiction-the-ebola-virus-will-go-airborne/
  5. Racaniello, V. TWiV 302: The sky is falling. This Week in Virology.
    http://www.twiv.tv/2014/09/14/twiv-302/
  6. 21, R. R. | J. & 2012. Fouchier study reveals changes enabling airborne spread of H5N1. CIDRAP.
    http://www.cidrap.umn.edu/news-perspective/2012/06/fouchier-study-reveals-changes-enabling-airborne-spread-h5n1
  7. Indiana Congressman says immigrant kids might have Ebola : Elections. nwitimes.com http://www.nwitimes.com/news/local/govt-and-politics/indiana-congressman-says-immigrant-kids-might-have-ebola/article_6cd84d69-3909-50d7-aa64-cc211b491795.html